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Reflexionar sobre una pasión que ha moldeado mi vida de maneras profundas y significativas. Desde muy pequeño, el sueño de capturar la intensidad del deporte a través de una cámara se arraigó en mí, inspirado por mi papá, quien también compartió este amor por la fotografía de cancha.

Cada vez que me encuentro detrás de la cámara, siento que estoy siguiendo sus pasos con tanto cariño. La fotografía es mucho más que imágenes; es la posibilidad de contar historias.

Pero este camino no lo he recorrido solo. He tenido la fortuna de cruzarme con personas que han creído en mí, que me han brindado oportunidades para crecer, aprender y perfeccionar mi trabajo. A todos ellos, les debo una parte de esta etapa tan cool y mi gratitud eterna. Gracias por confiar en mí, por darme chance de hacer lo que amo y por permitir que mi pasión se convierta en mi vida.

¡Feliz día a todos los que, como yo, encuentran en la fotografía su manera de ver el mundo y compartirlo con los demás!​