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Se trata del lago de Camécuaro, situado en el Estado de Michoacán. El título de la fotografía obedece a la leyenda que cuenta sobre la princesa Huanita quien de tanto llorar al perder a su amado guerrero en una batalla, se formó el lago. Al encontrarme de viaje tuve la oportunidad de presenciar su belleza. Me llamó la atención como el azul turquesa del agua y el verde intenso del ramaje contrastaban con el amarillo de las lanchas, me aboqué a la tarea de idear la composición, para reproducir lo que está observando. Estoy obsesionado con la nitidez y al tratarse de una fotografía que implicaba recopilar varios elementos, el primer paso fue considerar la profundidad de campo, después cuando ya tenía todos los elementos y ajustes necesarios en la cámara, fue necesario perseverar a que las personas se retiraran para poder capturar una imagen limpia de tal forma que lograra mi objetivo lo más fiel posible. Finalmente obtuve el resultado deseado, sin omitir destacar todo el proceso que implica tomar una sola fotografía. La cámara utilizada es una R6 con objetivo 24-105 serie L.